Stereoadicta: un fugaz vistazo al rock pop moreliano y otras cosas
- Polo Bautista
- 20 may
- 9 Min. de lectura
Durante el primer lustro del nuevo milenio, la escena moreliana se vio revitalizada gracias al rock pop de Stereoadicta. Dicha propuesta creada por Omar Estévez (guitarra) y Rodrigo Sánchez (bajo), despuntó rápidamente y su proyección a nivel nacional parecía promisoria. No obstante, diferentes contrariedades y el transcurrir del tiempo menoscabaron sus aspiraciones junto con la estabilidad del conjunto. Pese a todo, sus fundadores mantienen un discreto quehacer y bajo la conducción de Estévez, otros proyectos de análoga índole se están remodelando o ampliando. Sobre aquellos distantes días, sus complicaciones de salud y las metas en curso hablamos con el compositor y guitarrista moreliano.
¿Cuándo y cómo surgió Stereoadicta?
El bajista Rodrigo Sánchez (alias Roy Stereo) y yo (guitarra), teníamos un grupo a principios de los dos miles, se llamaba Luna Ácida. A partir de ese proyecto y junto con algunos cambios allá por el lejano 2004, conocimos a los restantes miembros de Stereoadicta: Carlos Cortez (batería), Manuel Contreras (vocalista) y Misael Tapia (teclado). Ese mismo año sacamos un EP homónimo y empezamos a presentarnos por todos lados. Aún como Luna Ácida, tocábamos una canción que se llamaba “Stereoadicta” y decidimos ponernos ese nombre, pero este surgió gracias a la fusión de dos apelativos de bandas británicas: Stereo MC’s y The Adicts. Muy diferente a lo que mucha gente suele suponer, me refiero a que no nos inspiramos en Soda Stereo.
¿Permanecen hasta hoy los integrantes originales en el proyecto?
Carlos, quien por cierto es sobrino de Eusebio Cortés, bajista de Los Bukis, ya no continúa con nosotros. Aunque, precisamente ahorita que preguntas estamos rotando elementos. A estas alturas de la vida, varios de ellos tienen compromisos y ocupaciones, pero tanto Roy como yo, todavía queremos lanzar nuevas composiciones y lo más probable es que cambiemos a algunos músicos, para poder continuar.

¿Qué me puedes contar de aquel primer EP homónimo?
Ese EP tiene cuatro canciones, pero cuando empezamos no era como hoy. En ese entonces nosotros grabamos o quemamos varias copias de nuestro CD, imprimimos las portadas y lo rolamos. Creo que ni siquiera existía la red social Myspace y la música por internet todavía no circulaba como ahora. Ese disco contiene temas como “Play”, “No me importa el ruido del mundo” o “Restos rojos de un amor morado”. Este último todavía lo tocamos.
¿Cómo recuerdas la escena moreliana independiente de aquella época? ¿Bajo qué contexto ustedes se desarrollaron?
Por esos años, en Morelia había y sigue habiendo muchas bandas metaleras. Sin embargo, esa escena es muy elitista. Ellos tienen su propio público, foros, etcétera, y son cosa aparte. Pero nosotros empezamos haciendo rock pop, lo cual era inusual. Existían algunas propuestas de corte emo-core o screamo, pero similares a nosotros, no. De hecho, tampoco había espacios para tocar y teníamos que rentar establecimientos, aunque siempre nos gustó jalar a otras bandas. Eso ocasionó que los toquines fueran muy buenos y eclécticos, pues imagina que solo había una o dos agrupaciones de cada género: punk, emo, hardcore, nosotros que éramos rock pop y demás. Todos a excepción de los metaleros, por lo que ya mencioné. Roy y yo, éramos quienes organizábamos las tocadas, allá por el 2004 y 2005, e invitábamos a otros. De esa camada salió y siguió por un buen rato La Venganza de Punk Ramón. A ellos los jalábamos a tocar y me parece que andan mucho por Ciudad de México (CDMX) y Estado de México. Creo que de todas esas bandas solamente ellos y Stereoadicta, seguimos tocando.
¿Cuál fue su experiencia durante esos germinales años?
La verdad, al comienzo nos fue bien con nuestro EP y giramos bastante por Michoacán. Luego lanzamos el LP Low/fi Life (2007, independiente), el cual grabó Omar Landa, músico paisano quien tenía una banda muy buena llamada La Parca. En mi juventud yo lo admiraba mucho y tuvimos la oportunidad de que nos produjera ese disco. No obstante, fue un poco caótico, porque considero que tal vez nos tardamos mucho tiempo en sacarlo. Primero fuimos a grabarlo a la CDMX, con el productor Francisco Zepeda, quien en 2006, se encargó del disco debut de Allison. En realidad, grabamos a la par de ellos. Zepeda estaba ahí, también produciéndoles. Nada más que hubo algunas cosas raras. Por decir, él quería sacar a Roy de la banda, porque tenía el concepto o la idea de mantener a músicos que atrajeran morritas y, según él, Roy no encajaba con dicho perfil. Entonces, quiso que lo echáramos. Obviamente, nosotros nos opusimos y dejamos de grabar con él, pero ya nos había cobrado una lana. Entonces nos quedamos sin dinero y sin disco. Recuerdo que nos dio solamente dos o tres rolas. Él incluso nos iba a añadir en la banda sonora de la película Niñas mal (2007), protagonizada por Martha Higareda, pero por ese desacuerdo finalmente eligió a otra propuesta. Posteriormente, a Allison le fue muy bien mientras que nosotros tuvimos que regresar a Morelia, para regrabar Low/fi Life. Así fue como mi tocayo terminó por intervenir en ese disco. Landa es un excelente baterista y productor. Hace algunos años estuvo produciéndole al Cirque du Soleil.
Después de la publicación de Low/fi Life ¿qué ocurrió?
Fue formidable. Conocimos otras ciudades y espacios, como el Multiforo Alicia y el Bulldog Cafe, en CDMX, entre varios más. También visitamos Torreón, Monterrey, Aguascalientes y por supuesto recorrimos todo Michoacán. Nos iba muy bien. Eran otros tiempos, los inicios de Myspace y demás redes sociales. Inclusive tuvimos una cuenta, pero todavía teníamos que rolar nuestro disco en los conciertos. Fuimos llamando la atención de boca en boca hasta que nos vio tocar el manager de Pastilla, agrupación que en esos años estaba muy posicionada y anduvimos de gira con ella por varias ciudades. En ese sentido estuvo muy bueno. Aunque en mi opinión, el grabar dos veces Low/fi Life nos había agotado y tampoco considero que el disco quedó como debería haber quedado. Quiero decir, no fue una grabación totalmente profesional, ya que terminamos sin el presupuesto para hacerlo. Además, resentíamos el cansancio mental, por lo que decidí abandonar al grupo y me fui a vivir a Canadá. Mis compañeros siguieron y grabaron otro LP: Magiscopio (2011, Naranjada Records). En retrospectiva, a nosotros nos tocó el salto de la vieja escuela al internet, por lo que fuimos de esas bandas que se quedaron en el limbo y nunca subimos bien los discos a plataformas. Ahora yo estoy subiendo algunas canciones, pero por separado o como sencillos. Fuimos y somos todavía totalmente do it yourself. O sea, lo hacemos todo nosotros, desde la música, los videoclips y hasta mandarlos a plataformas. En esos años que estuve en Stereoadicta, de 2004 a 2008, fungí como manager, productor, compositor, organizador, etc., hasta que después tuvimos apoyo de Pastilla.
¿Cómo fue que volviste a Stereoadicta?
Durante mi estancia en Canadá, ni siquiera nos hablamos y así estuvimos casi cinco años. Por mi parte, formé otra banda llamada Deer Murray, junto a la vocalista canadiense Laura Demers, pero cuando regresé aproximadamente en 2012, nos reconciliamos y desde entonces continuamos trabajando intermitentemente. Actualmente tengo dos grupos adicionales: Estévez and the Wet People (EATWP) y Odisea Nebulosa, y ellos se dedican a otras cosas, por lo que es más difícil coincidir. Debido a eso, Roy y yo queremos echarle al menos unos buenos kilos al proyecto, de ahí los reajustes que pretendemos realizar.

En 2015, publicaron un LP recopilatorio titulado Stereoadicta 2004 - 2015. Canciones del futuro. Háblame de esa placa y el motivo de su lanzamiento.
Así es, reversionamos canciones de nuestros discos anteriores, junto con algunas rolas nuevas. Ese LP solo se encuentra en Bandcamp y lo conforman dieciséis piezas. Se oye mucho tiempo desde el 2004, pero en forma y como debe ser una banda, Stereoadicta solamente funcionó hasta el 2008. Entonces, con Canciones del futuro nuestra intención fue cerrar un ciclo, aunque después seguimos sacando composiciones nuevas en distintas plataformas. Han de ser unos cuatro o cinco sencillos sueltos, entre esos “Moriría por ti” y “Desperdicio de amor”.
Recuerdo que en 2023, incluyeron a Stereoadicta dentro del Festival ¡Jalo! de Morelia, junto a otras propuestas nacionales y locales. ¿Cómo fue el reunirse y pisar nuevamente un escenario grande después de tanto tiempo y una pandemia?
Efectivamente, tocaron El Tri, Caifanes y Molotov, pero a nosotros nos encargaron abrirle a este último y realmente nos fue excelente. Mucha gente pensó que éramos una banda nueva, debido a que tenía tiempo que no tocábamos, pero les gustó mucho y las canciones atravesaron por un pequeño auge con un público fresco. Notamos que sí les prendió y conectamos. Luego de eso, hemos tocado un par de veces en mi establecimiento (Pop Mart) y le abrimos a otros proyectos foráneos como a Sgt. Papers o Los Bunyans.
¿Cuál es el estado actual de la banda? ¿En qué se encuentran trabajando?
Estamos grabando un nuevo disco y pensando cómo vamos a lanzarlo. En esta ocasión, sí queremos tocarlo y hacer varias presentaciones al viejo estilo. Salir de Michoacán y rolarlo por CDMX y otras ciudades. Como dije antes, pensamos que somos una generación perdida, porque nos quedamos en medio del internet y de lo que estaba antes. Hubo grupos que sí entraron al apogeo de la web, por ejemplo, Enjambre o Porter, quienes aprovecharon el momento y se proyectaron. En cambio, nosotros estuvimos ocupados regrabando y esa ola se nos fue. Además, no hemos sabido darnos a conocer.
A diferencia de hace años tengo entendido que ahora elaboras tu música desde casa y con tus propias herramientas. ¿Qué me dices de eso?
Tengo un estudio al cual nombré Disconauta Records, por lo que ya puedo grabar, producir y hacerlo todo. No necesito acudir a otro estudio o tener un productor. Por esa parte, ha sido más fácil. Aunque, eso me hubiera gustado que fuera al inicio, ya que los resultados no salieron como esperaba. En los comienzos de Stereoadicta y tras mi regreso, Manuel llegó a colaborar conmigo en algunas canciones e igualmente Roy, pero el noventa por ciento de los temas son composiciones, arreglos y producciones mías. Anteriormente, le enseñaba las ideas al grupo y las montábamos en el ensayo, pero ahora puedo grabar las canciones inmediatamente en mi estudio, incluso antes de tocarlas. Es muy diferente, me gusta más y se pierde menos tiempo. En dos o tres días me aviento la producción y listo.
En noviembre del año pasado, sufriste un infarto a causa de un mal congénito y afortunadamente has logrado reestablecerte. ¿Cómo ha trastocado ese padecimiento tu forma de trabajo y tus proyectos?
Es el impulso que tengo en este momento para hacer todo mejor y más concentrado, porque sí fue una experiencia fuerte. Yo pensé que no la libraba. Puede sonar pretencioso, pero en el hospital lo que más me preocupaba eran mis canciones, que estas se quedaran en la computadora sin grabarse y ver la luz. Desde mi salida del hospital, estoy tratando de reformar mis proyectos (EATWP, Odisea Nebulosa, Deer Murray y Stereoadicta). Lo hago con la intención de publicar todas esas canciones que tengo, ya que yo he sido siempre o mayormente el compositor en todos esos grupos. Mi diagnóstico es insuficiencia cardíaca crónica y los doctores me dijeron que estoy en riesgo de una muerte súbita. Imagina entonces, que cada día puede ser el último. Eso me cambió el chip mental. Quiero redondear y producir mis trabajos pendientes y que por lo menos quede mi música. Decir que hice algo en mi vida, aunque realmente mi existencia ha girado en torno a eso. La vida es difícil y a veces hago otras cosas, pero nunca he abandonado a la música.
¿Eso quiere decir que retomarás EATWP y Deer Murray?
Pasó que EATWP se convirtió en Odisea Nebulosa, propuesta integrada por Elisa Mendoza, Marlow Stars (ambas voz y sintetizadores) y yo, y en la que debido a nuestros gustos redirigimos la música hacia el synthrock, aunque con tintes más oscuros. Tengo varias canciones que ya no empatan con este concepto, de manera que decidí restaurar EATWP, pero con una nueva alineación. Ahí habrá canciones de corte pop. Por otra parte, en Deer Murray componía junto a Demers y debido a la distancia está difícil que nos reunamos. Tenemos un EP titulado Songs from an apartment (2012, Entes Anomicos Records), pero hay varias grabaciones guardadas. Queremos producir bien esas canciones y darlas finalmente a conocer. Espero se logre este año, pero ya veremos.

Recientemente Odisea Nebulosa estrenó “Hello stranger”. ¿En torno a qué versa este tema y cuáles son sus planes a futuro?
Estamos preparando un EP, serán cinco o seis canciones, pero acordamos publicar primero “Hello Stranger”, antes que las otras. Es una pieza que cuando la tocamos en vivo notamos que a la gente le gusta mucho. Además es la más roquera, por decirle de alguna manera, ya que en el resto proliferan los sintetizadores. Versa sobre una persona que se obsesiona con otra y le pide que no salga nunca de su habitación. Es una rola de amor y obsesión. El EP está adelantado y calculamos publicarlo este año, aunque no sabemos precisamente cuando. Nuestra principal dificultad se vincula al marketing en redes sociales y plataformas. No sabemos por dónde empezar o cómo hacerle para que las canciones lleguen a más personas. Hemos tocado mucho por aquí e incluso fuimos recientemente a CDMX, pero observamos que si no figuras en redes sociales es como estar muerto o no existieras.
De todos tus proyectos y novedades ¿qué es lo próximo a mostrarse?
Lo más cercano es un sencillo de EATWP, llamado “Pequeño amor de invierno triste”, el cual originalmente presenté al lado de Mendoza y Stars, pero antes de que emprendiéramos Odisea Nebulosa. A esa melodía la reversionamos con dos nuevas voces femeninas y la inclusión de bajo y batería. Tiene un sonido garage pop, a diferencia de la primera versión que emplea sintetizadores. Adicionalmente, planeamos lanzar en algunas semanas otra pieza llamada “Desde entonces mis ojos son dos focos rojos que atraen insectos muertos”. Esas las vas a poder escuchar en Spotify y demás plataformas. Hay presentaciones programadas, pero estamos por confirmarlas.
Comments